sábado, 4 de enero de 2025

LECTURAS DEL DOMINGO 5 DE ENERO SOLEMNIDAD DE LA EPIFANÍA DEL SEÑOR (BLANCO)

 

Entraron en la casa y vieron al niño con María, su madre, y postrándose, lo adoraron. Después, abriendo sus cofres, le ofrecieron regalos: oro, incienso y mirra.




Misa vespertina de la vigilia 

Esta Misa se dice en la tarde del día que precede a la solemnidad, ya sea antes o después de las primeras vísperas de la Epifanía. 

ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Bar 5, 5 

Levántate, Jerusalén, mira hacia oriente y contempla a tus hijos reunidos desde donde sale el sol hasta el ocaso. 

Se dice Gloria. 

ORACIÓN COLECTA 

Te rogamos, Señor, que ilumine nuestros corazones el esplendor de tu majestad, para que, venciendo las tinieblas de nuestro mundo, lleguemos a la patria de la eterna claridad. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos. 

En la celebración de la Misa de la Vigilia se utiliza el mismo formulario de lecturas que en la Misa del día de la Epifanía del Señor, tal como aparece en las páginas que siguen. 

Se dice Credo. 

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS 

Recibe, Señor, nuestros dones en la manifestación de tu Unigénito a los pueblos paganos, de manera que podamos ofrecerte nuestra alabanza y alcanzar la salvación eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor. 

Prefacio propio, como en la Misa del día.

Si se utiliza el Canon Romano, se dice Reunidos en comunión… propio. En las otras Plegarias eucarísticas también se dicen las partes propias para esta Misa. 

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Apoc 21, 23 

La claridad de Dios ilumina la ciudad santa de Jerusalén, a esa luz caminan las naciones. 

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN 

Renovados, Señor, por estos sagrados alimentos, imploramos tu misericordia, para que la estrella de tu justicia resplandezca siempre en nuestra vida y sea nuestro tesoro la confesión de tu nombre. Por Jesucristo, nuestro Señor. 

Puede utilizarse la fórmula de bendición solemne. 


Misa del día


ANTÍFONA DE ENTRADA cfr. MI 3, 1; 1 Cro 19, 12

Miren que ya viene el Señor todopoderoso; en su mano están el reino y la potestad y el imperio.

Se dice Gloria

ORACIÓN COLECTA

Señor Dios, que en este día manifestaste a tu Unigénito a las naciones, guiándolas por la estrella, concede a los que ya te conocemos por la fe, que lleguemos a contemplar la hermosura de tu excelsa gloria. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.

LITURGIA DE LA PALABRA

La gloria del Señor alborea sobre ti.

Del libro del profeta Isaías: 60, 1-6

Levántate y resplandece, Jerusalén, porque ha llegado tu luz y la gloria del Señor alborea sobre ti. Mira: las tinieblas cubren la tierra y espesa niebla envuelve a los pueblos; pero sobre ti resplandece el Señor y en ti se manifiesta su gloria. Caminarán los pueblos a tu luz y los reyes al resplandor de tu aurora.

Levanta los ojos y mira alrededor: todos se reúnen y vienen a ti; tus hijos llegan de lejos, a tus hijas las traen en brazos. Entonces verás esto radiante de alegría; tu corazón se alegrará y se ensanchará cuando se vuelquen sobre ti los tesoros del mar y te traigan las riquezas de los pueblos. Te inundará una multitud de camellos y dromedarios, procedentes de Madián y de Efá. Vendrán todos los de Sabá trayendo incienso y oro y proclamando las alabanzas del Señor. 

Palabra de Dios. 

Te alabamos, Señor.

Del salmo 71 

R/. Que te adoren, Señor, todos los pueblos.

Comunica, Señor, al rey tu juicio, y tu justicia al que es hijo de reyes; así tu siervo saldrá en defensa de tus pobres y regirá a tu pueblo justamente. R/.

Florecerá en sus días la justicia y reinará la paz, era tras era. De mar a mar se extenderá su reino y de un extremo al otro de la tierra. R/.

Los reyes de Occidente y de las islas le ofrecerán sus dones. Ante Él se postrarán todos los reyes y todas las naciones. R/.

Al débil librará del poderoso y ayudará al que se encuentra sin amparo; se apiadará del desvalido y pobre y salvará la vida al desdichado. R/.

También los paganos participan de la misma herencia que nosotros.

De la carta del apóstol san Pablo a los efesios: 3, 2-3. 5-6

Hermanos: Han oído hablar de la distribución de la gracia de Dios, que se me ha confiado en favor de ustedes. Por revelación se me dio a conocer este misterio, que no había sido manifestado a los hombres en otros tiempos, pero que ha sido revelado ahora por el Espíritu a sus santos apóstoles y profetas: es decir, que por el Evangelio, también los paganos son coherederos de la misma herencia, miembros del mismo cuerpo y partícipes de la misma promesa en Jesucristo.

Palabra de Dios. 

Te alabamos, Señor.

ACLAMACIÓN Mt 2, 2 







R/. Aleluya, aleluya.

Hemos visto su estrella en el Oriente y hemos venido a adorar al Señor. R/.

Hemos venido de Oriente para adorar al rey de los judíos.

Del santo Evangelio según san Mateo: 2, 1-12

Jesús nació en Belén de Judá, en tiempos del rey Herodes. Unos magos de Oriente llegaron entonces a Jerusalén y preguntaron: "¿Dónde está el rey de los judíos que acaba de nacer? Porque vimos surgir su estrella y hemos venido a adorarlo".

Al enterarse de esto, el rey Herodes se sobresaltó y toda Jerusalén con él. Convocó entonces a los sumos sacerdotes y a los escribas del pueblo y les preguntó dónde tenía que nacer el Mesías. Ellos le contestaron: "En Belén de Judá, porque así lo ha escrito el profeta: Y tú, Belén, tierra de Judá, no eres en manera alguna la menor entre las ciudades ilustres de Judá, pues de ti saldrá un jefe, que será el pastor de mi pueblo, Israel".

Entonces Herodes llamó en secreto a los magos, para que le precisaran el tiempo en que se les había aparecido la estrella y los mandó a Belén, diciéndoles: "Vayan a averiguar cuidadosamente qué hay de ese niño y, cuando lo encuentren, avísenme para que yo también vaya a adorarlo". Después de oír al rey, los magos se pusieron en camino, y de pronto la estrella que habían visto surgir, comenzó a guiarlos, hasta que se detuvo encima de donde estaba el niño. Al ver de nuevo la estrella, se llenaron de inmensa alegría. Entraron en la casa y vieron al niño con María, su madre, y postrándose, lo adoraron. Después, abriendo sus cofres, le ofrecieron regalos: oro, incienso y mirra. Advertidos durante el sueño de que no volvieran a Herodes, regresaron a su tierra por otro camino.

Palabra del Señor. 

Gloria a ti, Señor Jesús. 

Credo

PLEGARIA UNIVERSAL

Oremos con el espíritu bien dispuesto al mundo entero.

Después de cada petición diremos: Escúchanos, Padre.

Por la santa Iglesia de Dios, que ilumine a los hombres con la luz que resplandece en el rostro de Cristo. Oremos.

Por los hombres y mujeres de buena voluntad que no han descubierto aún el gozo de la fe. Oremos.

Por los países de misión, y para que cada vez sean más los presbíteros y religiosos, hijos de aquellas tierras. Oremos.

Por los niños y niñas que hoy viven esta fiesta llenos de alegría, y por aquellos que sufren la pobreza o el abandono. Oremos.

Por las enfermeras, enfermeros, y por aquellos a quienes atienden. Oremos.

Por cada uno de nosotros que hemos sido llamados de las tinieblas a la luz admirable de Cristo. Oremos.

Escucha, Padre, nuestra oración, y derrama tu Espíritu en nuestros corazones. Por Jesucristo, nuestro Señor.

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Mira con bondad, Señor, los dones de tu Iglesia, que no consisten ya en oro, incienso y mirra, sino en lo que por esos dones se representa, se inmola y se recibe como alimento, Jesucristo, Señor nuestro. El, que vive y reina por los siglos de los siglos.

Prefacio de la Epifanía

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN cfr. Mt 2, 2

Hemos visto su estrella en el Oriente y venimos con regalos a adorar al Señor.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Te pedimos, Señor, que tu luz celestial siempre y en todas partes vaya guiándonos, para que contemplemos con ojos puros y recibamos con amor sincero el misterio del que quisiste hacernos partícipes. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Puede utilizarse la fórmula de bendición solemne,

viernes, 3 de enero de 2025

LECTURAS DEL SÁBADO DE FERIA DE NAVIDAD 4 DE ENERO (BLANCO)

 

"¿Dónde vives, Rabí?" (Rabí significa `maestro'). Él les dijo: "Vengan a ver".





ANTÍFONA DE ENTRADA Gal 4, 4-5

Envió Dios a su Hijo, nacido de una mujer, para que recibiéramos la dignidad de hijos adoptivos.

ORACIÓN COLECTA

Dios todopoderoso y eterno, que con la venida de tu Unigénito has hecho resplandecer sobre el mundo una luz nueva, concédenos, que así como Jesucristo, al nacer de la Virgen María, ha querido compartir nuestra condición humana, así también nosotros lleguemos a compartir en su Reino la gloria de su divinidad. Él, que vive y reina contigo...

LITURGIA DE LA PALABRA

El que ha nacido de Dios no puede pecar.

De la primera carta del apóstol san Juan: 3, 7-10

Hijos míos: No dejen que nadie los engañe. Quien practica la santidad es santo, como Cristo es santo. Quien vive pecando, se deja dominar por el diablo, ya que el diablo es pecador desde el principio.

Pues bien, para eso se encarnó el Hijo de Dios: para deshacer las obras del diablo. Ninguno que sea hijo de Dios sigue cometiendo pecados, porque el germen de vida que Dios le dio permanece en él. No puede pecar, porque ha nacido de Dios.

En esto se distinguen los hijos de Dios de los hijos del diablo: todo aquel que no practica la santidad, no es de Dios; tampoco es de Dios el que no ama a su hermano. 

Palabra de Dios. 

Te alabamos, Señor.

Del salmo 97

R/. Toda la tierra ha visto al Salvador.

Cantemos al Señor un canto nuevo, pues ha hecho maravillas. Su diestra y su santo brazo le han dado la victoria. R/.

Alégrense el mar y el mundo submarino, el orbe y todos los que en él habitan. Que los ríos estallen en aplausos y las montañas salten de alegría. R/.

Regocíjese todo ante el Señor, porque ya viene a gobernar el orbe. Justicia y rectitud serán las normas con las que rija a todas las naciones. R/.


ACLAMACIÓN  Hb 1, 1-2






R/. Aleluya, aleluya.


En distintas ocasiones y de muchas maneras habló Dios en el pasado a nuestros padres, por boca de los profetas. Ahora, en estos tiempos, que son los últimos, nos ha hablado por medio de su Hijo. R/.

Hemos encontrado al Mesías.

Del santo Evangelio según san Juan: 1, 35-42

En aquel tiempo, estaba Juan el Bautista con dos de sus discípulos, y fijando los ojos en Jesús, que pasaba, dijo: "Éste es el Cordero de Dios". Los dos discípulos, al oír estas palabras, siguieron a Jesús. Él se volvió hacia ellos, y viendo que lo seguían, les preguntó: "¿Qué buscan?" Ellos le contestaron: "¿Dónde vives, Rabí?" (Rabí significa `maestro'). Él les dijo: "Vengan a ver".

Fueron, pues, vieron dónde vivía y se quedaron con él ese día. Eran como las cuatro de la tarde. Andrés, hermano de Simón Pedro, era uno de los dos que oyeron lo que Juan el Bautista decía y siguieron a Jesús. El primero a quien encontró Andrés, fue a su hermano Simón, y le dijo: "Hemos encontrado al Mesías" (que quiere decir `el Ungido'). Lo llevó a donde estaba Jesús y éste, fijando en él la mirada, le dijo: "Tú eres Simón, hijo de Juan. Tú te llamarás Kefás" (que significa Pedro, es decir, `roca'). 

Palabra del Señor. 

Gloria a ti, Señor Jesús.

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Señor Dios, fuente de toda devoción sincera y de la paz, concédenos honrar de tal manera tu majestad con estos dones, que, al participar en estos santos misterios, todos quedemos unidos en un mismo sentir. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Prefacio de Navidad

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 1, 16

De su plenitud todos hemos recibido gracia sobre gracias.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Señor, que tu pueblo, al que diriges con variados auxilios, obtenga de tu misericordia la ayuda presente y la futura, para que, recibiendo el necesario consuelo de las cosas pasajeras, más confiadamente aspire a las eternas. Por Jesucristo, nuestro Señor.

jueves, 2 de enero de 2025

LECTURAS DEL VIERNES DE FERIA DE NAVIDAD 3 DE ENERO (BLANCO)

 

'Aquel sobre quien veas que baja y se posa el Espíritu Santo, ése es el que ha de bautizar con el Espíritu Santo'.






MISA DEL SANTÍSIMO NOMBRE DE JESÚS

ANTÍFONA DE ENTRADA Flp 2, 10-11

Que al nombre de Jesús toda rodilla se doble, en el cielo, en la tierra, en los abismos, y que toda lengua proclame que Jesucristo es el Señor, para la gloria de Dios Padre.

ORACIÓN COLECTA

Señor Dios, que en la encarnación de tu Palabra pusiste el cimiento de la salvación del género humano, dale a tu pueblo la misericordia que te pide con insistencia, para que todos sepan que no existe otro nombre que deba ser invocado, sino el de tu Unigénito. Él, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.

LITURGIA DE LA PALABRA

El que permanece en Dios no peca.

De la primera carta del apóstol san Juan: 2, 29-3, 6

Queridos hijos: Si ustedes saben que Dios es santo, tienen que reconocer que todo el que practica la santidad ha nacido de Dios. Miren cuánto amor nos ha tenido el Padre, pues no sólo nos llamamos hijos de Dios, sino que lo somos. Si el mundo no nos reconoce, es porque tampoco lo ha reconocido a Él.

Hermanos míos, ahora somos hijos de Dios, pero aún no se ha manifestado cómo seremos al fin. Y ya sabemos que, cuando Él se manifieste, vamos a ser semejantes a Él, porque lo veremos tal cual es.

Y todo el que tiene puesta en Él esta esperanza, procura ser santo, como Jesucristo es santo. Todo el que comete pecado quebranta la ley, puesto que el pecado es quebrantamiento de la ley. Y si saben ustedes que Dios se manifestó para quitar los pecados, es porque en Él no hay pecado. Todo el que permanece en Dios, no peca. Todo el que vive pecando, es como si no hubiera visto ni conocido a Dios.

Palabra de Dios. 

Te alabamos, Señor.

Del salmo 97

R/. Aclamemos con júbilo al Señor.

Cantemos al Señor un canto nuevo, pues ha hecho maravillas. Su diestra y su santo brazo le han dado la victoria. R/.

La tierra entera ha contemplado la victoria de nuestro Dios. Que todos los pueblos y naciones aclamen con júbilo al Señor. R/.

Cantemos al Señor al son del arpa, suenen los instrumentos. Aclamemos al son de los clarines al Señor, nuestro rey. R/.

ACLAMACIÓN  Jn 1, 14. 12







R/. Aleluya, aleluya.


Aquel que es la Palabra se hizo hombre y habitó entre nosotros. A todos los que lo recibieron les concedió poder llegar a ser hijos de Dios. R/.

Este es el Cordero de Dios.

Del santo Evangelio según san Juan: 1, 29-34

En aquel tiempo, vio Juan el Bautista a Jesús, que venía hacia él, y exclamó: "Este es el Cordero de Dios, el que quita el pecado del mundo. Éste es aquel de quien yo he dicho: 'El que viene después de mí, tiene precedencia sobre mí, porque ya existía antes que yo'. Yo no lo conocía, pero he venido a bautizar con agua, para que Él sea dado a conocer a Israel".

Entonces Juan dio este testimonio: "Vi al Espíritu descender del cielo en forma de paloma y posarse sobre Él. Yo no lo conocía, pero el que me envió a bautizar con agua me dijo: 'Aquel sobre quien veas que baja y se posa el Espíritu Santo, ése es el que ha de bautizar con el Espíritu Santo'. Pues bien, yo lo vi y doy testimonio de que éste es el Hijo de Dios".

Palabra del Señor. 

Gloria a ti, Señor Jesús.

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Al presentarte estos dones que tu generosidad nos concede, te rogamos, Señor, que así como diste a Cristo, obediente hasta la muerte, el nombre por el que debemos salvarnos, nos concedas también a nosotros que nos proteja tu poder. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Prefacio de Navidad

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Sal 8, 2

¡Señor, Dios nuestro, qué admirable es tu nombre en toda la tierra!

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Señor, habiendo recibido en comunión la ofrenda que presentamos a tu majestad para honrar el nombre de Cristo, te rogamos que infundas abundantemente en nosotros tu gracia, para que nos alegremos de que también nuestros nombres estén escritos en el cielo. Por Jesucristo, nuestro Señor.

O bien

Feria del Tiempo de Navidad

ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 111, 4

Una luz se levanta en las tinieblas para los hombres de corazón recto: el Señor clemente, justo y compasivo.

ORACIÓN COLECTA

Te rogamos, Señor, que ilumines bondadosamente a tus fieles e inflames siempre sus corazones con el resplandor de tu gloria, para que constantemente reconozcamos a nuestro Salvador y acojamos la verdad. Él, que vive y reina contigo...

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Acepta benignamente, Señor, los dones de tu pueblo, para que recibamos, por este sacramento celestial, aquello mismo que el fervor de nuestra fe nos mueve a proclamar. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Prefacio de Navidad.

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN 1 Jn 4, 9

En esto se manifiesta el amor que Dios nos tiene; en que envió al mundo a su Hijo único, para que vivamos por Él.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Señor Dios, que nos unes a ti al permitirnos participar en tus sacramentos, realiza su poderoso efecto en nuestros corazones, y que la misma recepción de este don tuyo nos haga más dignos de seguirlo recibiendo. Por Jesucristo, nuestro Señor.

miércoles, 1 de enero de 2025

LECTURAS DEL JUEVES DE FERIA DE NAVIDAD 2 DE ENERO SAN BASILIO MAGNO Y SAN GREGORIO NACIANCENO (BLANCO

 

“Yo soy la voz que grita en el desierto"






ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sir 44, 15. 14

Los pueblos proclamen la sabiduría de los santos, y la Iglesia cante sus alabanzas; sus nombres vivirán por los siglos de los siglos.

ORACIÓN COLECTA

Dios nuestro, que te dignaste instruir a tu Iglesia con los ejemplos y enseñanzas de los santos obispos Basilio Magno y Gregorio Nacianceno, haz que aprendamos humildemente tu verdad y por la caridad la pongamos en práctica. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.

LITURGIA DE LA PALABRA

Que permanezca en ustedes lo que han oído desde el principio.

De la primera carta del apóstol san Juan: 2, 22-28

Hijos míos: ¿Quién es el mentiroso, sino aquel que niega que Jesús es Cristo? Ése es el anticristo, porque niega al Padre y al Hijo. Nadie que niegue al Hijo posee al Padre; pero quien reconoce al Hijo, posee también al Padre.

Que permanezca, pues, en ustedes lo que desde el principio han oído. Si permanece en ustedes lo que han oído desde el principio, también ustedes permanecerán en el Hijo y en el Padre. Ésta es la promesa que él mismo nos hizo: la vida eterna.

Les he escrito esto, pensando en aquellos que tratan de inducirlos al error. Recuerden que la unción que de él han recibido, permanece en ustedes y no necesitan enseñanzas de nadie; esta unción, que es verdad y no mentira, los ilustra a través de todas las cosas; permanezcan, pues, en él, como la unción les enseña.

Así pues, hijos míos, permanezcan en él, para que, cuando él se manifieste, tengamos plena confianza y no nos veamos confundidos por él en el día de su venida.

Palabra de Dios.

Te alabamos Señor.

Del salmo 97

R. Cantemos la grandeza del Señor.

Cantemos al Señor un canto nuevo, pues ha hecho maravillas. Su diestra y su santo brazo le han dado la victoria. R.

El Señor ha dado a conocer su victoria y ha revelado a las naciones su justicia. Una vez más ha demostrado Dios su amor y su lealtad hacia Israel. R.

La tierra entera ha contemplado la victoria de nuestro Dios. Que todos los pueblos y naciones aclamen con júbilo al Señor. R.



ACLAMACIÓN Heb 1, 1-2

R. Aleluya, aleluya.

En distintas ocasiones y de muchas maneras habló Dios en el pasado a nuestros padres, por boca de los profetas. Ahora, en estos tiempos, que son los últimos, nos ha hablado por medio de su Hijo. R.

Viene después de mí alguien que existía antes que yo.

Del santo Evangelio según san Juan: 1, 19-28

Este es el testimonio que dio Juan el Bautista, cuando los judíos enviaron desde Jerusalén a unos sacerdotes y levitas para preguntarle: “¿Quién eres tú?”.

Él reconoció y no negó quién era. Él afirmó: “Yo no soy el Mesías”. De nuevo le preguntaron: “¿Quién eres, pues? ¿Eres Elías?”. Él les respondió: “No lo soy”. “¿Eres el profeta?”. Respondió: “No”. Le dijeron: “Entonces dinos quién eres, para poder llevar una respuesta a los que nos enviaron. ¿Qué dices de ti mismo?”. Juan les contestó: “Yo soy la voz que grita en el desierto: ‘Enderecen el camino del Señor’, como anunció el profeta Isaías”.

Los enviados, que pertenecían a la secta de los fariseos, le preguntaron: “Entonces ¿por qué bautizas, si no eres el Mesías, ni Elías, ni el profeta?”. Juan les respondió: “Yo bautizo con agua, pero en medio de ustedes hay uno, al que ustedes no conocen, alguien que viene detrás de mí, a quien yo no soy digno de desatarle las correas de sus sandalias”.

Esto sucedió en Betania, en la otra orilla del Jordán, donde Juan bautizaba.

Palabra del Señor.

Gloria a ti, Señor Jesús.

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Recibe, Señor, este sacrificio que, para tu gloria, tu pueblo ofrece en honor de los santos Basilio y Gregorio, y concédenos alcanzar la eterna salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor.

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. 1 Cor 1, 23-24

Nosotros predicamos a Cristo crucificado: a Cristo, fuerza de Dios y sabiduría de Dios.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Que esta mesa celestial, Dios todopoderoso, robustezca y aumente el vigor espiritual de todos los que celebramos la festividad de los santos Basilio y Gregorio, para que conservemos íntegro el don de la fe y caminemos por el sendero