lunes, 12 de septiembre de 2011

LECTURAS DEL LUNES XXIV DEL T. ORDINARIO 12 DE SEPTIEMBRE DULCE NOMBRE DE MARÍA



EL DULCE NOMBRE DE MARÍA.





DULCE NOMBRE DE MARÍA





ANTÍFONA DE ENTRADA (cfr. Jdt 13, 18-19)

Virgen María, el Altísimo te ha bendecido más que a todas las mujeres de la tierra, y de tal manera te ha glorificado que los hombres no cesan de alabarte.

ORACIÓN COLECTA

Concede, Dios todopoderoso, a quienes celebramos el glorioso nombre de la bienaventurada Virgen María, que ella nos obtenga los dones de tu misericordia. Por nuestro Señor Jesucristo...

LITURGIA DE LA PALABRA

Pidan a Dios por todos los hombres, pues Él quiere que todos se salven.


De la primera carta del apóstol san Pablo a Mateo: 2,1-8


Te ruego, hermano, que ante todo se hagan oraciones, plegarias, súplicas y acciones de gracias por todos los hombres, y en particular, por los jefes de Estado y las demás autoridades, para que podamos llevar una vida tranquila y en paz, entregada a Dios y respetable en todo sentido. Esto es bueno y agradable a Dios, nuestro Salvador, pues Él quiere que todos los hombres se salven y todos lleguen al conocimiento de la verdad, porque no hay sino un solo Dios y un solo mediador entre Dios y los hombres, Cristo Jesús, hombre Él también, que se entregó como rescate por todos.
Él dio testimonio de esto a su debido tiempo y de esto yo he sido constituido, digo la verdad y no miento, pregonero y apóstol para enseñar la fe y la verdad.Quiero, pues, que los hombres, libres de odios y divisiones, hagan oración donde quiera que se encuentren, levantando al cielo sus manos puras.


 Palabra de Dios.


 Te alabamos, Señor.




Del salmo 27


 R/. Salva, Señor, a tu pueblo.



Escucha, Señor, mi súplica, cuando te pido ayuda y levanto las manos hacia tu santuario. R/.



El Señor es mi fuerza y mi escudo, en Él confía mi corazón; Él me socorrió y mi corazón se alegra y le canta agradecido. R/.



El Señor es la fuerza de su pueblo, el apoyo y la salvación de su Mesías Salva, Señor, a tu pueblo y bendícelo, porque es tuyo, apaciéntalo y condúcelo para siempre. R/.



ACLAMACIÓN (Jn 3, 16) 

R/. Aleluya, aleluya.



Tanto amó Dios al mundo, que le entregó a su Hijo único, para que todo el que crea en Él tenga vida eterna. R/.





Ni en Israel he hallado una fe tan grande.


Del santo Evangelio según san Lucas: 7, 1-10


En aquel tiempo, cuando Jesús terminó de hablar a la gente, entró en Cafarnaúm. Había allí un oficial romano, que tenía enfermo y a punto de morir a un criado muy querido. Cuando le dijeron que Jesús estaba en la ciudad, le envió a algunos de los ancianos de los judíos para rogarle que viniera a curar a su criado. Ellos, al acercarse a Jesús, le rogaban encarecidamente, diciendo: "Merece que le concedas ese favor, pues quiere a nuestro pueblo y hasta nos ha construido una sinagoga". Jesús se puso en marcha con ellos.


Cuando ya estaba cerca de la casa, el oficial romano envió unos amigos a decirle: "Señor, no te molestes, porque yo no soy digno de que tú entres en mi casa; por eso ni siquiera me atreví a ir personalmente a verte. Basta con que digas una sola palabra y mi criado quedará sano. Porque yo, aunque soy un subalterno, tengo soldados bajo mis órdenes y le digo a uno: '¡Ve!, y va; a otro: '¡Ven!', y viene; y a mi criado: '¡Haz esto!', y lo hace".
Al oír esto, Jesús quedó lleno de admiración, y volviéndose hacia la gente que lo seguía, dijo: "Yo les aseguro que ni en Israel he hallado una fe tan grande". Los enviados regresaron a la casa y encontraron al criado perfectamente sano.


 Palabra del Señor.


 Gloria a ti, Señor Jesús.

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Te pedimos, Señor, que la intercesión de la bienaventurada siempre Virgen Maria recomiende ante ti nuestras ofrendas y nos haga aceptables a tu majestad, al venerar su santo nombre. Por Jesucristo, nuestro Señor.

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (cfr. Lc 1, 48)

Dichosa me llamarán todas las generaciones, porque Dios puso sus ojos en la humildad de su esclava.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Concede, Señor, que obtengamos la gracia de tu bendición por la intercesión de la Virgen Maria, Madre de Dios, para que, al celebrar su venerable nombre, experimentemos su ayuda en todas nuestras necesidades. Por Jesucristo, nuestro Señor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario