viernes, 30 de noviembre de 2018

LECTURAS DEL VIERNES XXXIV DEL T. ORDINARIO 30 DE NOVIEMBRE SAN ANDRÉS APÓSTOL (ROJO)


Jesús caminaba por la ribera del mar de Galilea, vio a dos hermanos, Simón, llamado después Pedro, y Andrés, los cuales estaban echando las redes al mar, porque eran pescadores.






ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Mt 4, 1 8-1 9

Por la ribera del mar de Galilea, Jesús vio a dos hermanos, Pedro y Andrés, los llamó: Síganme y los haré pescadores de hombres.

Se dice Gloria.

ORACIÓN COLECTA

Dios de gloria y majestad, tú que elegiste al apóstol san Andrés para que fuera predicador del Evangelio y pastor de tu Iglesia, haz que sea siempre ante ti nuestro poderoso intercesor. Por nuestro Señor Jesucristo...

LITURGIA DE LA PALABRA

La fe viene de la predicación y la predicación consiste en anunciar la palabra de Cristo.

De la carta del apóstol san Pablo a los romanos: 10, 9-18


Hermanos: Basta que cada uno declare con su boca que Jesús es el Señor y que crea en su corazón que Dios lo resucitó de entre los muertos, para que pueda salvarse. En efecto, hay que creer con el corazón para alcanzar la santidad y declarar con la boca para alcanzar la salvación.


Por eso dice la Escritura: Ninguno que crea en Él quedará defraudado, porque no existe diferencia entre judío y no judío, ya que uno mismo es el Señor de todos, espléndido con todos los que lo invocan, pues todo el que invoque al Señor como a su Dios, será salvado por Él.

Ahora bien, ¿cómo van a invocar al Señor, si no creen en Él? ¿Y cómo van a creer en Él, si no han oído hablar de Él? ¿Y cómo van a oír hablar de Él, si no hay nadie que se lo anuncie? ¿Y cómo va a haber quienes lo anuncien, si no son enviados? Por eso dice la Escritura: ¡Qué hermoso es ver correr sobre los montes al mensajero que trae buenas noticias!

Sin embargo, no todos han creído en el Evangelio. Ya lo dijo Isaías: Señor, ¿quién ha creído en nuestra predicación? Por lo tanto, la fe viene de la predicación y la predicación consiste en anunciar la palabra de Cristo. Entonces yo pregunto: ¿Acaso no habrán oído la predicación? ¡Claro que la han oído!, pues la Escritura dice: La voz de los mensajeros ha resonado en todo el mundo y sus palabras han llegado hasta el último rincón de la tierra. 

Palabra de Dios.

Te alabamos, Señor.




Del salmo 18


R/. El mensaje del Señor resuena en toda la tierra.


Los cielos proclaman la gloria de Dios y el firmamento anuncia la obra de sus manos. Un día comunica su mensaje al otro día y una noche se lo transmite a la otra noche. R/.


Sin que pronuncien una palabra, sin que resuene su voz, a toda la tierra llega su sonido y su mensaje hasta el fin del mundo. R/.



ACLAMACIÓN  Mt 4, 19







R/. Aleluya, aleluya.


Síganme, dice el Señor, y yo los haré pescadores de hombres. R/.

Ellos, inmediatamente, dejando las redes, lo siguieron.

Del santo Evangelio según san Mateo: 4, 18-22


Una vez que Jesús caminaba por la ribera del mar de Galilea, vio a dos hermanos, Simón, llamado después Pedro, y Andrés, los cuales estaban echando las redes al mar, porque eran pescadores. Jesús les dijo: "Síganme y los haré pescadores de hombres". Ellos inmediatamente dejaron las redes y lo siguieron.


Pasando más adelante, vio a otros dos hermanos, Santiago y Juan, hijos de Zebedeo, que estaban con su padre en la barca, remendando las redes, y los llamó también. Ellos, dejando enseguida la barca y a su padre, lo siguieron. 

Palabra del Señor. 

Gloria a ti, Señor Jesús.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Concédenos, Dios todopoderoso, que te agraden estos dones que te presentamos en la festividad de san Andrés, y haz que sean para nosotros fuente de vida eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Prefacio I o II de los Apóstoles.

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Jn 1, 41-42

Andrés dijo a su hermano Simón: Hemos encontrado al Mesías, que quiere decir "Ungido", y los llevó a donde estaba Jesús.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Que nos fortalezca, Señor, la comunión de tu sacramento, para que, a ejemplo de san Andrés, apóstol, compartiendo los sufrimientos de Cristo, merezcamos vivir con él en la gloria. Él, que vive y reina por los siglos de los siglos.





Puede utilizarse la fórmula de bendición solemne.

jueves, 29 de noviembre de 2018

LECTURAS DEL JUEVES XXXIV DEL T. ORDINARIO 29 DE NOVIEMBRE (VERDE)


Cuando estas cosas comiencen a suceder, pongan atención y levanten la cabeza, porque se acerca la hora de su liberación.






ANTÍFONA DE ENTRADA

Bendito sea Dios, Padre, Hijo y Espíritu Santo, porque ha tenido misericordia de nosotros.

ORACIÓN COLECTA

Dios Padre, que al enviar al mundo la Palabra de verdad y el Espíritu Santificador, revelaste a todos los hombres tu misterio admirable, concédenos que, profesando la fe verdadera, reconozcamos la gloria de la eterna Trinidad y adoremos la gloria de la eterna Trinidad y adoremos la Unidad de su majestad omnipotente. Por nuestro Señor Jesucristo...

LITURGIA DE LA PALABRA

Cayó Babilonia, la grande.

Del libro del Apocalipsis del apóstol san Juan: 18, 1-2. 21- 23; 19, 1-3. 9


Yo, Juan, vi un ángel que bajaba del cielo. Su poder era inmenso y con resplandor iluminó la tierra. Gritó con voz potente y dijo: "Ha caído ya la gran Babilonia y ha quedado convertida en morada de demonios, en guarida de toda clase de espíritus impuros, en escondrijo de aves inmundas y repugnantes".


Otro ángel poderoso levantó una piedra del tamaño de una rueda de molino y la arrojó al mar, diciendo: "Con esta misma violencia será arrojada Babilonia, la gran ciudad, y desaparecerá para siempre. Ya no se volverán a escuchar en ti ni cantos, ni cítaras, ni flautas, ni trompetas. Ya no habrá jamás en ti artesanos de ningún oficio, ni se escuchará más el ruido de la piedra de molino; ya no brillarán en ti las luces de las lámparas ni volverá a escucharse en ti el bullicio de las bodas. Esto sucederá porque tus comerciantes llegaron a dominar la tierra y tú, con tus brujerías, sedujiste a todas las naciones".

Después de esto oí algo así como una inmensa multitud que cantaba en el cielo: "¡Aleluya! La salvación, la gloria y el poder pertenecen a nuestro Dios, porque sus sentencias son legítimas y justas. Él ha condenado a la gran prostituta, que corrompía a la tierra con su fornicación y le ha pedido cuentas de la sangre de sus siervos". Y por segunda vez todos cantaron: "¡Aleluya! El humo del incendio de la gran ciudad se eleva por los siglos de los siglos".

Entonces un ángel me dijo: "Escribe: 'Dichosos los invitados al banquete de bodas del Cordero' ".

Palabra de Dios.

Te alabamos, Señor.




Del salmo 99


R/. Dichosos los invitados al banquete del Señor.


Alabemos a Dios todos los hombres, sirvamos al Señor con alegría y con júbilo entremos en su templo. R/.


Reconozcamos que el Señor es Dios, que él fue quien nos hizo y somos suyos, que somos su pueblo y su rebaño. R/.

Entremos por sus puertas dando gracias, crucemos por sus atrios entre himnos, alabando al Señor y bendiciéndolo. R/.

Porque el Señor es bueno, bendigámoslo, porque es eterna su misericordia y su fidelidad nunca se acaba. R/.



ACLAMACIÓN Lc 21, 28


R/. Aleluya, aleluya.


Estén atentos y levanten la cabeza, porque se acerca la hora de su liberación, dice el Señor. R/.

Jerusalén será pisoteada por los paganos, hasta que se cumpla el plazo señalado por Dios.

Del santo Evangelio según san Lucas: 21, 20-28


En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: "Cuando vean a Jerusalén sitiada por un ejército, sepan que se aproxima su destrucción. Entonces, los que estén en Judea, que huyan a los montes; los que estén en la ciudad, que se alejen de ella; los que estén en el campo, que no vuelvan a la ciudad; porque esos días serán de castigo para que se cumpla todo lo que está escrito.


¡Pobres de las que estén embarazadas y de las que estén criando en aquellos días! Porque vendrá una gran calamidad sobre el país y el castigo de Dios se descargará contra este pueblo. Caerán al filo de la espada, serán llevados cautivos a todas las naciones y Jerusalén será pisoteada por los paganos, hasta que se cumpla el plazo que Dios les ha señalado.

Habrá señales prodigiosas en el sol, en la luna y en las estrellas. En la tierra, las naciones se llenarán de angustia y de miedo por el estruendo de las olas del mar; la gente se morirá de terror y de angustiosa espera por las cosas que vendrán sobre el mundo, pues hasta las estrellas se bambolearán. Entonces verán venir al Hijo del hombre en una nube, con gran poder y majestad. Cuando estas cosas comiencen a suceder, pongan atención y levanten la cabeza, porque se acerca la hora de su liberación".

Palabra del Señor. 

Gloria a ti, Señor Jesús.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Por la invocación de tu nombre, santifica, Señor, estos dones que te presentamos y transfórmanos por ellos en una continua oblación a ti. Por Jesucristo, nuestro Señor.

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Gal 4, 6

Porque ustedes son hijos de Dios, Dios infundió en sus corazones el Espíritu de su Hijo, que clama: Abbá, Padre.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Que la recepción de este sacramento y nuestra profesión de fe en la Trinidad Santa y Eterna, y en su Unidad indivisible, nos aprovechen, Señor, Dios nuestro, para la salvación de cuerpo y alma. Por Jesucristo, nuestro Señor.

miércoles, 28 de noviembre de 2018

LECTURAS DEL MIÉRCOLES XXXIV DEL T. ORDINARIO 28 DE NOVIEMBRE (VERDE)


Si se mantienen firmes, conseguirán la vida.






ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 69, 2. 6

Dios mío, ven en mi ayuda; Señor, date prisa en socorrerme. Tú eres mi auxilio y mi salvación; Señor, no tardes.

ORACIÓN COLECTA

Ayuda, Señor, a tus siervos, que imploran tu continua benevolencia, y ya que se glorían de tenerte como su creador y su guía, renueva en ellos tu obra creadora y consérvales los dones de tu redención. Por nuestro Señor Jesucristo...

LITURGIA DE LA PALABRA

Cantaban el cántico de Moisés y el cántico del Cordero.

Del libro del Apocalipsis del apóstol san Juan: 15, 1-4


Yo, Juan, tuve una visión: Vi en el cielo otra gran señal maravillosa: Eran siete ángeles, portadores de las últimas siete plagas, con las cuales Dios pondrá fin a su cólera.


Vi también una especie de mar de cristal, mezclado con fuego; y los vencedores de la bestia, de su estatua y del número simbólico de su nombre, estaban de pie junto al mar de cristal, con las cítaras que Dios les había dado, y cantaban el cántico de Moisés, el siervo de Dios, y el cántico del Cordero, diciendo: "Grandes y maravillosas son tus obras, Señor, Dios todopoderoso; justo y verdadero tu proceder, rey de las naciones. ¿Quién no te respetará, Señor? ¿Quién no te alabará? Ya que sólo tú eres santo, y todas las naciones vendrán a adorarte, porque tus justas sentencias han quedado patentes".

Palabra de Dios. 

Te alabamos, Señor.




Del salmo 97


R/. Señor, tus obras son maravillosas.


Cantemos al Señor un canto nuevo, pues ha hecho maravillas. Su diestra y su santo brazo le han dado la victoria. R/.


El Señor ha dado a conocer su victoria y ha revelado a las naciones su justicia. Una vez más ha demostrado Dios su amor y su lealtad hacia Israel. R/.

Alégrese el mar y el mundo submarino, el orbe y todos los que en él habitan. Que los ríos estallen en aplausos y las montañas salten de alegría. R/.

Regocíjese todo ante el Señor, porque ya viene a gobernar el orbe. Justicia y rectitud serán las normas con las que rija a todas las naciones. R/.



ACLAMACIÓN  Ap 2, 10






R/. Aleluya, aleluya.


Sé fiel hasta la muerte y te daré como premio la vida, dice el Señor. R/.

Todos los odiarán a ustedes por causa mía. Sin embargo, ni un cabello de su cabeza perecerá.


Del santo Evangelio según san Lucas: 21, 12-19


En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: "Los perseguirán y los apresarán, los llevarán a los tribunales y a la cárcel, y los harán comparecer ante reyes y gobernadores, por causa mía. Con esto ustedes darán testimonio de mí.


Grábense bien que no tienen que preparar de antemano su defensa, porque yo les daré palabras sabias, a las que no podrá resistir ni contradecir ningún adversario de ustedes.

Los traicionarán hasta sus propios padres, hermanos, parientes y amigos. Matarán a algunos de ustedes, y todos los odiarán por causa mía. Sin embargo, ni un cabello de su cabeza perecerá. Si se mantienen firmes, conseguirán la vida".

Palabra del Señor. 

Gloria a ti, Señor Jesús.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Santifica, Señor, por tu piedad, estos dones y al recibir en oblación este sacrificio espiritual, conviértenos para ti en una perenne ofrenda. Por Jesucristo, nuestro Señor.

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN  Jn 6, 35

Yo soy el pan de vida, dice el Señor. Quien venga a mí no tendrá hambre, y quien crea en mí no tendrá sed.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Acompaña, Señor, con tu permanente auxilio, a quienes renuevas con el don celestial, y a quienes no dejas de proteger, concédeles ser cada vez más dignos de la eterna redención. Por Jesucristo, nuestro Señor.

martes, 27 de noviembre de 2018

LECTURAS DEL MARTES XXXIV DEL T. ORDINARIO 27 DE NOVIEMBRE (VERDE)


En diferentes lugares habrá grandes terremotos, epidemias y hambre, y aparecerán en el cielo señales prodigiosas y terribles.






ANTIFONA DE ENTRADA Sal 73, 20. 19

Acuérdate, Señor, de tu alianza y no olvides para siempre la vida de tus pobres.

ORACIÓN COLECTA

Señor Dios que, en tu bondad y omnipotencia, cuidas de tus creaturas, concédenos un amor eficaz hacia los hermanos que carecen de alimentos, para que, desterrada el hambre, puedan servirte con un corazón libre y tranquilo. Por nuestro Señor Jesucristo…

LITURGIA DE LA PALABRA

El tiempo de la cosecha ha llegado ya; la mies de la tierra está madura.

Del libro del Apocalipsis del apóstol san Juan: 14, 14-19


Yo, Juan, tuve otra visión: Vi una nube blanca y en ella a alguien que parecía un ser humano, con una corona de oro en la cabeza y una hoz afilada en la mano.


Entonces un ángel salió del templo y le gritó con potente voz al que estaba sentado en la nube: "Empuña la hoz y ponte a segar; el tiempo de la cosecha ha llegado ya; la mies de la tierra está madura". El que estaba sentado en la nube pasó su hoz sobre la tierra y recogió la cosecha de la tierra.

Salió otro ángel del templo celestial, también él con una afilada hoz en su mano. Y salió del templo otro más, el ángel que tiene poder sobre el fuego, y le gritó con potente voz al que tenía la hoz afilada: "Empuña tu hoz afilada y corta los racimos de la viña de la tierra, porque sus uvas ya están maduras".

El ángel acercó su hoz a la tierra, cosechó la viña de la tierra y echó los racimos en el gran lagar de la cólera de Dios. Pisaron las uvas en el lagar, fuera de la ciudad, y del lagar corrió tanta sangre, que subió hasta los frenos de los caballos, en una extensión de unos trescientos kilómetros. 

Palabra de Dios.

Te alabamos, Señor.




Del salmo 95


R/. Que todo se alegre ante el Señor.


"Reina el Señor", digamos a los pueblos. Él afianzó con su poder el orbe, gobierna a las naciones con justicia. R/.



Alégrense los cielos y la tierra, retumbe el mar y el mundo submarino; salten de gozo el campo y cuanto encierra, manifiesten los bosques regocijo. R/.

Regocíjese todo ante el Señor, porque ya viene a gobernar el orbe. Justicia y rectitud serán las normas con las que rija a todas las naciones. R/.



ACLAMACIÓN  Ap 2, 10







R/. Aleluya, aleluya.


Sé fiel hasta la muerte y te daré como premio la vida, dice el Señor. R/.

No quedará piedra sobre piedra.

Del santo Evangelio según san Lucas: 21, 5-11



En aquel tiempo, como algunos ponderaban la solidez de la construcción del templo y la belleza de las ofrendas votivas que lo adornaban, Jesús dijo: "Días vendrán en que no quedará piedra sobre piedra de todo esto que están admirando; todo será destruido".


Entonces le preguntaron: "Maestro, ¿cuándo va a ocurrir esto y cuál será la señal de que ya está a punto de suceder?".

Él les respondió: "Cuídense de que nadie los engañe, porque muchos vendrán usurpando mi nombre y dirán: 'Yo soy el Mesías. El tiempo ha llegado'. Pero no les hagan caso. Cuando oigan hablar de guerras y revoluciones, que no los domine el pánico, porque eso tiene que acontecer, pero todavía no es el fin".

Luego les dijo: "Se levantará una nación contra otra y un reino contra otro. En diferentes lugares habrá grandes terremotos, epidemias y hambre, y aparecerán en el cielo señales prodigiosas y terribles".

Palabra del Señor. 

Gloria a ti, Señor Jesús.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Mira, Señor, la ofrenda que de tus mismos excelentes dones te presentamos, para que la abundancia de vida divina y la unidad en el amor que ella significa, nos impulse a compartir equitativamente lo nuestro y a cumplir con el deber de la mutua fraternidad. Por Jesucristo, nuestro Señor.

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Mt 11, 28

Vengan a mí, todos los que están fatigados y agobiados por la carga, y yo les daré alivio, dice el Señor.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Dios, Padre todopoderoso, te suplicamos que el pan vivo, bajado del cielo, nos fortalezca para que ayudemos a nuestros hermanos que padecen hambre y necesidad. Por Jesucristo, nuestro Señor.

lunes, 26 de noviembre de 2018

LECTURAS DEL LUNES XXXIV DEL T. ORDINARIO 26 DE NOVIEMBRE (VERDE)


Ella, en su pobreza, ha dado todo lo que tenía para vivir.






ANTÍFONA DE ENTRADA Hch 4, 32-33

La multitud de los que hablan creído tenía un sólo corazón y una sola alma. Con grandes muestras de poder, los Apóstoles daban testimonio de la resurrección del Señor Jesús y todos gozaban de gran estimación entre el pueblo, aleluya.

ORACIÓN COLECTA

Señor Dios, que enseñaste a tu Iglesia a cumplir todos tus celestiales mandamientos, en señal de amor a ti mismo y al prójimo, danos un espíritu de paz y de benevolencia, para que tu familia entera se consagre a ti de todo corazón y alcance la concordia por la pureza de intención. Por nuestro Señor Jesucristo...

LITURGIA DE LA PALABRA

Llevaban grabado en la frente el nombre del Cordero y el nombre de su Padre.

Del libro del Apocalipsis del apóstol san Juan: 14, 1-3. 4-5


Yo, Juan, tuve otra visión: Vi al Cordero, en pie sobre el monte Sión y con él, ciento cuarenta y cuatro mil personas, que llevaban grabado en la frente el nombre del Cordero y el nombre de su Padre.


Y oí un ruido que venía del cielo, parecido al estruendo del mar y al estampido de un trueno poderoso; el ruido que oía era como el de un gran coro acompañado de arpas. Cantaban un cántico nuevo ante el trono, ante los cuatro seres vivientes y los ancianos.

Y nadie podía cantar el cántico, fuera de los ciento cuarenta y cuatro mil, que habían sido rescatados de la tierra. Éstos son los que acompañan al Cordero a dondequiera que va; éstos son los que han sido rescatados de entre los hombres, las primicias para Dios y para el Cordero; en la boca de ellos no hubo mentira y son irreprochables ante Dios.

Palabra de Dios. 

Te alabamos, Señor.




Del salmo 23


R/. Dichosos los limpios de corazón.


Del Señor es la tierra y lo que ella tiene, el orbe todo y los que en él habitan, pues él lo edificó sobre los mares, él fue quien lo asentó sobre los ríos. R/.


¿Quién subirá hasta el monte del Señor? ¿Quién podrá entrar en su recinto santo? El de corazón limpio y manos puras y que no jura en falso. R/.

Ése obtendrá la bendición de Dios, y Dios, su salvador, le hará justicia. Ésta es la clase de hombres que te buscan y vienen ante ti, Dios de Jacob.



ACLAMACIÓN  Mt 24, 42. 44









R/. Aleluya, aleluya.


Estén preparados, porque no saben a qué hora va a venir el Hijo del hombre. R/.

Vio a una viuda pobre que echaba dos moneditas.

Del santo Evangelio según san Lucas: 21, 1-4


En aquel tiempo, levantando los ojos, Jesús vio a unos ricos que echaban sus donativos en las alcancías del templo. Vio también a una viuda pobre, que echaba allí dos moneditas, y dijo: "Yo les aseguro que esa pobre viuda ha dado más que todos. Porque éstos dan a Dios de lo que les sobra; pero ella, en su pobreza, ha dado todo lo que tenía para vivir".


Palabra del Señor. 

Gloria a ti, Señor Jesús.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Señor Dios, que por medio de tus sacramentos y tus mandamientos nos renuevas conforme a tu imagen, dirige, compasivo, nuestros pasos por tus sendas, para que en virtud de este sacrificio que te ofrecemos, nos concedas el don de la caridad que esperamos recibir de ti. Por Jesucristo, nuestro Señor.

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 17, 20-21

Padre, te pido por los que van a creer en mí, para que todos sean uno en nosotros y el mundo crea que tú me has enviado, dice el Señor.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Habiendo recibido el sacramento de la unidad, concede, Señor, a quienes hemos convivido hoy en tu casa en santa concordia, que poseamos aquella paz que hemos dado y conservemos la que hemos recibido. Por Jesucristo, nuestro Señor.