sábado, 18 de agosto de 2018

LECTURAS DEL SÁBADO XIX DEL T. ORDINARIO 18 DE AGOSTO (VERDE O BLANCO)


"Dejen a los niños y no les impidan que se acerquen a mí, porque de los que son como ellos es el Reino de los cielos".







ANTÍFONA DE ENTRADA

María, el Altísimo te ha bendecido más que a todas las mujeres de la tierra, y ha glorificado tu nombre de tal modo, que tu alabanza siempre está en labios de todos.


ORACION COLECTA 

Señor Dios, cuyo Hijo, estando para morir en la cruz, quiso que la santísima Virgen María, a quien había escogido como Madre suya, fuera nuestra Madre, concede, propicio, a quienes nos acogemos, seguros, bajo su amparo, que seamos confortados al invocar su nombre maternal. Por nuestro Señor Jesucristo...

LITURGIA DE LA PALABRA

Yo juzgaré a cada uno según su proceder.

Del libro del profeta Ezequiel: 18, 1-10. 13. 30-32


El Señor me habló y me dijo: "¿Por qué andan repitiendo este refrán en Israel: los padres fueron los que comieron uvas verdes y son los hijos a quienes se les destemplan los dientes'?


Les juro por mi vida, dice el Señor Dios, que nadie volverá a repetir ese refrán en Israel. Sépanlo: todas las vidas son mías, lo mismo la vida del padre que la del hijo. Así pues, el hombre que peque, ése morirá.

El hombre que es justo y vive de acuerdo con el derecho y la justicia; que no ofrece sacrificios a los ídolos ni los adora; que no deshonra a la mujer de su prójimo; que no explota a sus semejantes y les devuelve la prenda empeñada; que no roba, sino que da de comer al hambriento y viste al desnudo; que no presta con usura ni acumula intereses; que no comete maldades y juzga imparcialmente los delitos; que observa mis preceptos y cumple con fidelidad mis mandamientos, ese hombre es justo y ciertamente vivirá, dice el Señor Dios. Si el hijo del justo es ladrón u homicida y quebranta alguno de mis mandamientos, ciertamente morirá y será responsable de sus propios crímenes.

Pues bien, pueblo de Israel, yo juzgaré a cada uno de ustedes según su proceder, dice el Señor Dios. Arrepiéntanse de todos sus pecados, apártense de ellos y no morirán. Arrepiéntanse de todas las infidelidades que han cometido, estrenen un corazón nuevo y un espíritu nuevo y así no morirán, pues yo no quiero que nadie muera, dice el Señor Dios. Arrepiéntanse y vivirán".

Palabra de Dios. 

Te alabamos, Señor.




Del salmo 50


R/. Crea en mí, Señor, un corazón puro.


Crea en mí, Señor, un corazón puro, un espíritu nuevo para cumplir tus mandamientos. No me arrojes, Señor, lejos de ti ni retires de mí tu santo espíritu. R/.


Devuélveme tu salvación, que regocija, mantén en mí un alma generosa. Enseñaré a los descarriados tus caminos y volverán a ti los pecadores. R/.

Tú, Señor, no te complaces en los sacrificios, y si te ofreciera un holocausto, no te agradaría. Un corazón contrito te presento, y a un corazón contrito, tú nunca lo desprecias. R/.



ACLAMACIÓN  Cfr. Mt 11, 25




R/. Aleluya, aleluya.


Te doy gracias, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has revelado los misterios del Reino a la gente sencilla. R/.

No les impidan a los niños que se acerquen a mí, porque de los que son como ellos es el Reino de los cielos.

Del santo Evangelio según san Mateo: 19,13-15


En aquel tiempo, le presentaron unos niños a Jesús para que les impusiera las manos y orase por ellos. Los discípulos regañaron a la gente; pero Jesús les dijo: "Dejen a los niños y no les impidan que se acerquen a mí, porque de los que son como ellos es el Reino de los cielos". Después les impuso las manos y continuó su camino.


Palabra del Señor. 

Gloria a ti, Señor Jesús.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Mira, Señor, los dones que te ofrecemos, para que nuestros corazones, inundados con la claridad del Espíritu Santo, por la intercesión de la siempre Virgen santa María, se empeñen sin cesar en mantenerse unidos a Cristo, tu Hijo. Él, que vive y reina por los siglos de los siglos.

Prefacio de Santa Maria Virgen.

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Lc 1, 26-27

El ángel Gabriel fue enviado por Dios a una virgen, y el nombre de la virgen era María.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Dios nuestro, concede a quienes has alimentado en la mesa de la Palabra y de la Eucaristía, rechazar, bajo la guía y protección de la santísima Virgen, lo que es indigno del nombre cristiano, y hacer siempre lo que ese nombre significa. Por Jesucristo, nuestro Señor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario